Un Sevillano en Benidorm 3

Esos primeros días se hacían interminables, nos metían una caña increíble, a la que la mayoría o ninguno estábamos acostumbrados, y llegábamos a la camareta más cansados que un borrico de alquiler.

Más de una noche, se oía llorar a alguno, hasta que el cansancio lo rendía del todo.

A esos los envidiaba.

Otros, por diversas circunstancias, no echábamos de menos nuestras vidas de civil, y aquella situación, además de novedosa, hacía que nos sintiésemos libres, aun estando allí, para decidir y hacer con nuestras vidas lo que quisiéramos.

Aun así, envidiaba a esos que tenían la suerte de llorar alguna noche,  echando de menos a sus padres.

Bueno, dejemos ese tema y hablemos de cosas más alegres.

Como por ejemplo ir a tiro,  como  me gustaba ir a tiro.

Recuerdo,  por raro que parezca, haber hecho muy buenas migas con un alférez de la IMEC, que me dejaba disparar con su pistola y con el Z, además de lanzar las PO2, pero lo que más me molaba y creo que a todos era disparar con la MG, eso sí que era una máquina para matar malos.

Aunque ahora que lo pienso bien, eso de antes no lo hacíamos siendo reclutas. Eso fue cuando volvimos del permiso de jura al C.I.R. para hacer el Curso de Conductores y algunos nos apuntábamos voluntarios para llevar a los suboficiales y a la tropa en los Land-Rover y camiones.

No me cuadraba que siendo recluta te dejaran disparar con la MG.
Había tardes que las pasábamos limpiando a la “novia”.

Mira si eran fantasmas, que nos decían que a partir de ahora el CETME, seria nuestra novia.

Bueno pues lo desmontábamos enterito, pieza por pieza y lo volvíamos a montar una vez que las habíamos limpiado con mucho esmero.

Con mucho esmero y con mucha parsimonia, porque cuanto antes terminases, más posibilidades había de que te mandasen a hacer otra cosa, que seguro que te iba a gustar menos, como por ejemplo, refuerzo de cocina, y eso estaba a la orden del día.

La mayoría de las tardes, sino todas, las pasábamos en el Hogar del Soldado.

Ese era el sitio perfecto para ir conociendo a fondo a todos tus nuevos compañeros.

Allí, entre  bocatas de jamón con tomate y botellas de calimocho, íbamos abriendo nuestros corazones a esa gente que solo conocías de siete u ocho días.

Es curioso, porque eso  no lo haces con nadie que conozcas en la calle, sin embargo, aquello era distinto, todos estábamos en el mismo barco y esos que eran desconocidos hace unos días, ahora, y por arte de magia, habían pasado a ser “tus hermanos” en los que confiabas plenamente.

Uno de mis amigos del barrio, que hizo la mili en Zaragoza y pasó más frio que una espuerta de perritos chicos, me dio un consejo cuando se licenció, lo hizo un año antes de irme yo.

“Nunca seas de los primeros, ni de los últimos, procura  no destacar en nada y mantenerte en un lugar intermedio”

Como si eso fuera fácil…

Soy de Sevilla, y el acento andaluz hace mucha gracia fuera de mi tierra y por si fuera poco me llamo León, pero León de nombre, y así iba a ser difícil no destacar.

El primer fin de semana que nos dejaron salir, nos fuimos los “cinco magníficos”*  a la Plaza Gomila, todos con el uniforme de granito, que nunca supe porque se llamaba así.

*Cinco magníficos: Luis Ferrero, de Benavente, Santiago Contreras, de Guadalajara, El cabo Mateo, de Ciudad Rodrigo, el Olvera, de Olvera y yo, de Sevilla

Pantalón por dentro de las botas, aun no teníamos zapatos, chaqueta abotonada hasta el cuello y cinturón negro, de cuero, con la hebilla gorda y reluciente. Y como  no teníamos donde cambiarnos,  estuvimos todo el día así vestidos.

Penoso, pero cierto.

Estando en Gomila, mas aburridos que oju, decidimos coger un taxi para irnos a la playa, y como no conocíamos nada del lugar, dejamos que el taxista nos llevara donde él quisiera, con una sola condición, queríamos ver tetas.

Dicho y hecho, el tío nos llevó a Cam Pastilla.

Y allí estábamos los cinco más salidos del globo, vestidos de romano y sin saber qué hacer.

Hasta que vimos unos vestuarios en los que por 5 duros podías dejar la ropa en una taquilla y bañarte.

Y los bañadores? Jajajajajaja…

Qué pena no tener esa foto.

Esos cinco catetos, con los calzoncillos que te daban allí,  corriendo para la playa.

Pero lo peor vino cuando tuvimos que salir del agua, con esos calzoncillos de algodón gordo y empapados, que se nos caían hasta los tobillos y pesaban más que una manta mojá.

Esa foto sí que valdría hoy dinerito.

Hasta un momento antes de  llegar allí, aquella playa era bonita y con glamur, y nosotros nos encargamos de quitarle todo su encanto.

Pero bueno,  lo que queríamos a toda costa, era ver tetas, y vaya si las vimos.

Misión cumplida.

Nos volvimos a Gomila para comer y pasamos el resto de la tarde sentados en los bancos de la plaza, esperando que llegase la hora de volver al C.I.R.

El resto del día lo pasamos en el Hogar del Soldado, haciendo lo que más nos gustaba, beber calimocho.

Para las siguientes salidas a Palma, habíamos conseguido una habitación, cerca de Gomila, con dos camas y un ropero, que pagábamos entre los cinco.

Cortesía de un Bisa que se licenciaba y nos hizo el favor de presentarnos a la casera, que tenía pinta de Madame, y nos cedió la habitación por el mismo dinero.

!!Temblad, polacas, los magníficos saldrían en vaqueros y camisa entallada marcando musculitos.!!

JA,JA,JA,JA,JA,JA,JA,JA,...

aju hio...DEMAZIAO PA MI CUERPO!!

lei antes el mensaje y acudieron por aqui asustaos mi parienta y el niño creyendo que me habia dao un ataque....de risa!!

JA,JA,JA,JA,JA,JA,JA,.....

esto es como para enmarcarlo y colgarlo en la pared para alegrarle la vida al personal....

la parienta dice que estoy fatal, que me rio solo como los tontos...

JA,JA,JA,JA,JA,JA,JA,JA,JA,...

me voy al sobre.

muy bueno , si señor, vaya fichaje para el foro este Leon ¡¡¡

juanito_bcn escribió:

muy bueno , si señor, vaya fichaje para el foro este Leon ¡¡¡

di que si juanito_bcn...

a mi me ha entrao otra vez el ataque de risa...JA,JA,JA,JA,JA,JA,...

oju que arte tiene el Leon!!

sino fuera por estos ratitos...

Yihaaa ¡¡¡¡ Vaya recuerdos. El compañero Leon me ha hecho retroceder algunos años..... buenos más que algunos, .. un monton de años. .... Si es verdad la primera salida era toda una experiencia. Vestidos de romanos, con cara de lerdos, moreno militar (Cara Roja) por el tiempo que se estaba en la explanada y pelones. Todo un cristo.

Mi primera salida fue de escándalo y lo que mas me jode es que no la puedo contar (para según que cosas un caballero no tiene memoria) lo que si os voy a contar que venia con nosotros un chaval de un pueblecillo cerca de valladolid , que no había visto la playa en su vida y tetas solo las del interviu y teníais que ver la cara que ponía paseando por Can Pastilla ..... hay Can Pastilla que recuerdos por dios ¡¡¡

Más salidos que un picaporte andábamos todos. ¡¡cuanta mentira con el bromuro!!, o a lo mejor es que no funcionaba por esas latitudes.

Bueno León, esto va a ser una cura de edad, el balsamo de Fierabras, el elixir de la vida.....nuestros recuerdos.

mas de uno perdio la virginidad en la mili y por primera vez en su vida...

"mojo' el pincel"...

hasta para eso les sirvio la mili.

Verano del 80, el Arenal. discoteca Zorbas, en la arena blanca y fresca. Una chica valenciana, gordita y que no paraba de reirse (a mi me daba igual). Este fue el estreno en Mallorca. Con tantas tetas germánicas y empiezo el recorrido con producto nacional.

A ver si ahora resulta que fui el más tonto....que el verano en Mallorca es largo. Lo mejor....en Magalluf, Nederlandse dames.